En contra de lo que muchos creen, las cocinas estrechas son muy comunes. Más, eso no debería suponer un problema para ti. No importa que tan grande sea el espacio, lo importante es que te sientas a gusto en él.
Con una buena distribución, conseguirás mucho espacio de almacenaje, dispondrás de hueco en la encimera para preparar tus platos y podrás moverte con total libertad. ¡Estos son nuestros 6 consejos para decorar una cocina estrecha!
Distribuye los muebles en I
Teniendo una cocina estrecha y alargada, solo tenemos una opción para colocar los muebles: en forma de I en una de las paredes. La más profunda de la habitación para que no entorpezcan el paso, con muebles que tengan un fondo de 40-60 cm.
Armarios, electrodomésticos, el fregadero… Todo en el mismo lado, dejando el otro vacío. Asi lo tendrás disponible por si necesitas poner una mesa, o conseguir algo de espacio de almacenamiento extra.
Apuesta por el minimalismo
En lugar de perder el tiempo pensando en donde encajar cada mueble, ¿por qué no optas por una cocina minimalista? Es el mejor estilo decorativo para espacios pequeños.
Imagínatelo; muebles sencillos (que pueden ser abiertos o con puertas de cristal templado), las paredes con baldas o estanterías para colocar los ingredientes en tarros de cristal, una mesa plegable para conseguir espacio en el que preparar los alimentos, un par de sillas… ¡y listo! ¿A qué no necesitas nada más?
El color es muy importante
Cuánto más pequeño y estrecho es el espacio, más importancia tiene el color predominante en la habitación. En espacios tan pequeños se suele utilizar el color blanco, ya que da sensación de amplitud.
Ahora bien, en base a la iluminación de la cocina, puedes escoger otros tonos; si tiene mucha luz natural puedes elegir un gris para las paredes o el suelo. Los muebles en tonos madera un poco oscuros, o combina el blanco con puertas de cristal templado en rojo, naranja o azul para que luzca moderna y elegante.
¿Qué la cocina tiene poca luz natural? El color blanco debe predominar en las paredes, pudiendo elegir un tono más oscuro en el suelo (como un gris o un suelo que simule la madera) y muebles en las variantes más claras del marrón, como el color arena o tierra.
Conseguir espacio para una mesa
Al enfrentarse al reto de decorar una cocina estrecha, lo primero que se descarta es la mesa. Parece imposible incorporarla a la decoración, sin que esta luego vaya a ser un estorbo. Pero, ¿no sería genial conseguir un pequeño espacio en el que desayunar por las mañanas?
Hay dos opciones: la primera es colocarla al fondo, bajo la ventana. Una mesa cuadrada, con un par de sillas o butacas. ¡Y listo! Un espacio sencillo y agradable en el que tomarse el café cada mañana mientras se lee el periódico o para cenar en pareja. Si necesitas espacio para un tercero, puedes utilizar bancos en lugar de sillas, o comprar que las butacas tengan “un compartimento estanco” en el que guardar el tercer asiento.
La otra opción es comprar una mesa y ubicarla en la pared contraria a los muebles de la cocina. Las mesas plegables son una buena opción, puesto que al cerrarla dejan el espacio libre. Sin embargo, nosotros te aconsejamos una mesa alta, de unos 40 cm de profundidad, acompañada de un par de taburetes. Es más atractivo y práctico a nivel visual.
Apuesta por el Open concept
¿Eres incapaz de imaginarte cocinando en un espacio tan estrecho, a pesar de los consejos anteriores? Entonces, ¡tira las paredes de la cocina!
Normalmente esta estancia se encuentra cerca del salón, o pared con pared. Derriba las paredes para unificar ambos espacios, consiguiendo una cocina de estilo americano. Esto te abre un mundo de posibilidades; como permitirte tener una isla, la cual puede servir para dividir los espacios, conseguir más espacio de almacenaje o distribuir los muebles en forma de L o U.
¡Mucho cuidado! Las cocinas de concepto abierto están muy bien, pero el espacio de la cocina y el salón/comedor debe estar perfectamente diferenciado. Para ello, pon un suelo diferente en la cocina, pinta las paredes con un tono distinto o utiliza los muebles para establecer el comienzo de una zona y el fin de otra.
Otra advertencia es que, ahora que has ganado amplitud, no abuses del mobiliario. Compra los muebles que necesites en ese momento. Si más adelante precisas de más espacio de almacenaje, siempre podrás comprar un mueble extra para conseguirlo.
Los electrodomésticos instalados en torre
Para cocinar determinados platos, el horno es indispensable. El microondas podríamos decir que es capricho. Pero, es cierto que siempre viene bien tener uno para calentar algunos platos.
Ahora bien, ¿cómo podrías tener ambos electrodomésticos sin que estos roben espacio y sean un estorbo? Instalando ambos en forma de torre; el horno a la altura de tu cintura, y el microondas de tu cabeza. Esto, además, te ayudará a ganar espacio de almacenaje con un armario en la parte inferior y superior.