Habrá quien siempre lo haya visto en su casa, pero la mayoría de nosotros, lo tendrá por primera vez, ahora que tiene la suya propia. Hablamos de vestidores. Esas habitaciones o espacios dedicados a colocar la ropa que tenemos en casa (o la que vamos a utilizar en casa temporada), de manera ordenada y con el suficiente espacio como para tener todo a la vista, sin necesidad de andar rebuscando o de cambiar de habitación para coger cada una de las prendas que vamos a llevar ese día.
En este artículo te contamos cómo diseñar un vestidor en tu casa, ya sea porque vas a pedirle a alguien que lo haga por ti y así sabes qué es lo que quieres antes de solicitar el presupuesto o porque te has propuesto hacerlo por tu cuenta y así conoces los puntos clave que tienes que tener en cuenta para hacerlo.
Qué es un vestidor y sus características
Seguro que lo primero que te ha venido a la mente es una habitación gigante llena de armarios, ropa, complementos y hasta comida. Sí: las películas americanas nos han mostrado esta imagen muchas veces, pero no se trata de concepto procedente de este continente, sino de Europa, si bien es cierto que no hay datos precisos de cuándo se creó el primero.
Pero centrémonos en lo importante: ¿qué es un vestidor? Se trata de una estancia o de un espacio amplio dedicado a guardar la ropa y los complementos, en el que, además, tenemos sitio para poder cambiarnos.
Esto nos lleva al primer error: un vestidor no es un armario grande donde poder guardar un montón de ropa bien ordenadita. ¿Por qué? Porque no te puedes meter en este espacio.
Sin embargo y como no todo el mundo tiene el espacio suficiente para dedicar una sola habitación a este menester, también hay nuevos conceptos de vestidores, como por ejemplo, dedicarle un espacio cerrado a una zona de una habitación grande o disponer de vestidores portátiles, de manera que puedes desplazar ese armario especial a una zona donde podrás cambiarte con tranquilidad y así tener un vestidor a tu alcance.
Tipos de vestidores
Lo bueno de los vestidores es que se adaptan muy bien a las necesidades y estilos de cada casa. Puedes tener desde uno clásico y elegante, como son los vestidores de diseño italiano o una más casero, dividiendo el espacio de tu habitación en dos, sólo mediante un armario.
A continuación te presentamos algunos de los tipos de vestidores más comunes, que sirven tanto para casas pequeñas, como para las más grandes:
- Una habitación específica: es el vestidor ideal. ¿Qué elementos tiene que tener? Básicamente, armarios a medida para cada tipo de prendas que utilices de manera habitual. Por ejemplo: uno para camisas, otro en el que se puedan colgar corbatas, poner sombreros, botas altas, abrigos largos, etc. Además, también tendrá que haber un espacio para la joyería/bisutería, así como espejos, una o varias sillas cómodas, etc. En definitiva: que esté completamente preparado para que te puedas vestir o cambiar de ropa, sin problemas de espacio.
- Vestidor con baño: es otro de los modelos ideales, porque te permite salir de la ducha y no enfriarte a la hora de vestirte o hacer tus necesidades antes de ponerte la ropa, además de poder maquillarte o lavarte los dientes, por ejemplo.
- Vestidor dentro del dormitorio: sin necesidad de que tengas dos habitaciones, el armario frontal puede dividir el espacio en dos y que una parte de la habitación tenga esa intimidad para vestirse. Por supuesto, tiene que haber hueco suficiente como para que le puedas llamar vestidor de verdad. En estos casos y para que el espacio sea más amplio, nuestra recomendación es que las puertas de los armarios sean de espejos; así, el espacio parecerá más grande.
- Con espacio para la plancha: un 2 x 1 perfecto, porque si ves que en el momento tienes la ropa arrugada lo puedes hacer directamente o guardarla en el armario correspondiente, según la terminas de planchar.
- En el pasillo de la habitación: o de una zona de paso donde te puedas vestir en la intimidad (bastará con poner unas puertas o paneles para lograrlo), de manera que aprovechas ese espacio y no necesitas tener una habitación de más dedicada a la ropa.
- Aprovecha el baño de la habitación: si es tu caso, también puedes convertir ese espacio en vestidor, con el añadido del aseo. No es muy recomendable tener ducha o bañera porque las prendas se pueden ver afectadas por la humedad, a menos de que el baño también sea muy grande y puedas dividirlo en dos.
Aspectos a tener en cuenta
Si estás pensando en tener tu propio vestidor en casa, ten en cuenta:
- El espacio del que dispones: en función del mismo podrás decantarte por un un estilo u otro.
- Las personas que lo vais a utilizar: no es lo mismo un vestidor para una sola persona, que para una pareja o la familia al completo.
- Vuestro estilo de ropa: dependiendo del mismo, vas a necesitar un tipo de armario u otro.
- La distribución de la casa: hay algunas que tienen espacios muertos (como los pasillos que te mencionaba más arriba) que se pueden utilizar perfectamente; también habitaciones con bajada de altura, donde se puede aprovechar el espacio para hacer armarios o guardar ropa de otras temporadas, por ejemplo.
En resumen: se trata de conocer tu estilo de vestimenta, un lugar donde ubicarlo y ponerte manos a la obra.
Algunas imágenes para aprender a aprovechar el espacio
Más allá de lo que te acabamos de contar, te dejamos una serie de imágenes de decoración de vestidores, para que te puedas hacer una idea de las diferentes opciones que existen.
Un consejo: cuando veas estas fotos de vestidores, quédate con la idea de los mismos y no tanto con el tamaño.